En vísperas de las elecciones para un referendo constitucional en Cuba, existía un enconado empeño por parte del régimen en pasar las
modificaciones a la Constitución a como diera lugar. Ellos deciden y cuentan
los votos. No obstante cerca de 2,5
millones de cubanos de alguna forma; no asistiendo, votando en blanco, anulando
las boletas y votando No; se opusieron a los planteamientos sobre las
modificaciones constitucionales. Si hubieran votado en libertad y bajo las premisas
de una Ley Electoral democrática y un Consejo Electoral independiente, sin duda
hubiera ganado el NO.
Aquí, a continuación, un claro ejemplo de ataques
y manipulación de la información. Un pastor
bautista, Carlos Sebastián Hernández de Armas, actual Secretario General e
Historiador de la Convención Bautista de
Cuba Occidental., fue atacado por funcionarios del régimen Castro comunista. El
Blog Religion en Revolución ha mencionado en su momento la controversia sobre la
Iglesia Bautista de Yaguajay y la ocupación violenta de las oficinas de la
Junta de Misiones en La Habana. Ahora le toca a la prensa que controla la dictadura,
que arremete contra el Pastor Hernández de Armas. Lean el artículo que aparece en el sitio web
Cuba Sí firmado por Rigoberto Fundora,
de quien no tenemos dato alguno para completar la información.
Escrito
por Rigoberto Fundora.
Sábado, 23 Febrero 2019 14:17
El Pastor de la Iglesia Bautista "Ebenezer" del Cotorro, en La
Habana, Carlos Sebastián Hernández Armas, Secretario General e Historiador en
Convención Bautista de Cuba Occidental, esconde sus verdaderas intenciones
cuando afirma que votará NO el próximo domingo en el referendo Constitucional
de Cuba.
Hernández
Armas pone sus oficios como contrarrevolucionario por encima de los derechos
del prójimo consagrados en la nueva Carta Magna de la Isla y que van desde la
libertad de pensamiento y práctica religiosa, hasta la educación gratis, la
cobertura universal de salud, la calidad en los servicios, o las garantías a la
vida, entre otros muchos.
Solo
basta una mirada a la nueva Constitución para percatarse de su carácter
inclusivo y progresista, construido con los criterios de la sabiduría popular y
que beneficia a todos los sectores de la vida del país, incluida la feligresía
bautista: el Estado reconoce, respeta y garantiza la libertad religiosa.
Pero no
se trata solamente de libertad religiosa que se consagra en el artículo 15,
donde se reitera que “las instituciones
religiosas y asociaciones fraternales están separadas del Estado y todas tienen
los mismos derechos y deberes. Las distintas creencias y religiones gozan de
igual consideración”.
El
artículo 42 subraya que “todas las
personas son iguales ante la ley, reciben la misma protección y trato de las
autoridades y gozan de los mismos derechos, libertades y oportunidades, sin
ninguna discriminación por razones de sexo, género, orientación sexual,
identidad de género, edad, origen étnico, color de la piel, creencia religiosa,
discapacidad, origen nacional o territorial, o cualquier otra condición o
circunstancia personal que implique distinción lesiva a la dignidad humana”.
Entonces,
¿por qué se ufana en votar NO si en la Constitución están recogidos sus derechos?
A todas
luces, sin esconderse, Hernández Armas recibe indicaciones y financiamiento de
la contrarrevolución en Estados Unidos que busca un cambio de régimen en Cuba,
de allí su juramento a la bandera de las estrellas y las barras y no al
prójimo, al que debiera su servicio incondicional, ética y transparencia como
Pastor.
Conocimos
que trabaja con un personaje de la calaña de Teo Babún quien recibe dinero del
gobierno de EE.UU para dinamitar la unidad entre las religiones cubanas.
Según
publicó el periódico Granma recientemente, ¿con quién cuenta la administración
Trump para sembrar la discordia y revitalizar los propósitos del llamado Plan
Bush, del 2004, el cual aseguraba que “las
iglesias y otras instituciones religiosas tienen un importante papel en la
construcción de una Cuba libre”, o sea, una Cuba plegada a sus designios?
Foto que acompaña al artículo.
Entregan premio al contrarrevolucionario
Óscar Elías Biscet González
|
Y
responde el rotativo que para estas tareas sucias Estados Unidos cuenta con el
mercenario Teo Babún, y con su organización: Asociación Alcance Humanitario
Evangélico (Evangelical Chiristian Humanitarian Outreach for Cuba), ECHO Cuba.
Según
documentos del Departamento de Estado Norteamericano, “ECHO Cuba tiene sustancial experiencia en programas de la USAID y
combatiendo el totalitario régimen de Fidel Castro”.
Iroel
Sánchez argumenta, además, cómo Babún recibió de la USAID, en el 2009, “una
asignación de 1 033 582 dólares y en el 2010 firmó un contrato por otros 320
000, según revelaciones del sitio Cubamoneyproject. El mismo espacio publicó
que ECHO Cuba, en marzo de 2010, anunció que estaba ofreciendo concesiones por
75 000 dólares para promover la libertad religiosa en Cuba”.
Ya más
cercano a nuestros días, en 2017, en su artículo Los dineros del Tío Obama,
Néstor García Iturbe denunció cómo la Fundación Nacional para la Democracia
(NED, por sus siglas en inglés) financia a Babún mediante los proyectos
Acercamiento Humanitario Evangélico Cristiano a Cuba y Abogando por la libertad
de religión en Cuba, con montos de 60 074 dólares, en 2014; 70 000 dólares, en
2015, y 100 000 dólares, en 2016.
Tales
programas sustentan la acción subversiva con la promoción de eventos y
materiales sobre la “libertad de religión”
y “la democracia”. En medio de todo
ello encontramos a Carlos Sebastián Hernández Armas, quien ha alabado
reiteradamente a connotados contrarrevolucionarios, algunos de ellos personas
violentas que han estado en la cárcel por cometer delitos comunes como Óscar
Elías Biscet González, a quién le entregara hasta un premio, el Patmos y a
Guillermo Fariñas.
Con el
prójimo en segundo plano, está claro entonces para quien trabaja el Pastor
Hernández Armas cuando busca que sus feligreses voten No ante la nueva
constitución.
Y
además, no le gusta que le llamen contrarrevolucionario, ¿entonces qué es?
respóndase Ud.
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