mayo 30, 2017

La represión en Cuba prioriza a quienes intentan vivir su Fe también en el ámbito político.

Rev. Mario Félix Lleonart Barroso.*
Desafortunadamente para muchos creyentes, sea cual fuere la religión que se profese, existe una diferencia entre lo que se cree y lo que se vive. Es lo que algunos sociólogos en el ámbito cristiano denominan como esquizofrenia espiritual. Con razón declara Carlos Scott, Mentor en Mision GloCal y Miembro Asociado de la Comisión de Misiones en World Evangelical Alliance en El movimiento iberoamericano y las iglesias: reflexiones sobre nuestra misionologia:
«… ser cristiano se entiende exclusivamente en categorías religiosas y cúlticas. Esto significa el conocimiento de prácticas, credos, observancia del domingo, membresía, asistencia, la frecuencia de los cultos, el apoyo a la Iglesia, etc. Hemos tenido mucho éxito: “logramos retirar a los cristianos del mundo”. Con más de 80.000.000 de creyentes en Iberoamérica parece que no pudimos permear la sociedad con los valores del Reino de Dios…Debemos afirmarnos en que tanto la evangelización como la acción social son componentes de la misión. La evangelización y la acción social no son componentes o partes separadas de la misión, sino más bien dimensiones de la misión única e indivisible de la Iglesia…Por lo tanto hablar de Misión es hablar de un mensaje integral de salvación que no conoce fronteras de ningún orden y que está dirigido a todo ser humano y considera toda la realidad de la persona: lo físico, lo moral, lo espiritual, lo intelectual, lo social o lo político…La encarnación es el modelo para la misión de la Iglesia. En su encarnación, Jesús se identificó con la humanidad pecadora, se solidarizó con ella en sus aspiraciones, angustias y debilidades y la dignificó como criatura hecha a imagen de Dios. La Iglesia está llamada a encarar su misión al estilo de Jesús.»
Son precisamente aquellos creyentes que comprenden en Cuba que la Fe cristiana no es para vivir en solitario o para aislarse en guetos, sino precisamente para involucrarse y participar social y políticamente en transformar a la nación y así ayudar a que salga del caos en el que se encuentra, quienes se convierten in so facto en el blanco principal de la represión; y reprimir a alguien solo por intentar vivir y llevar a la práctica lo que cree tiene que ser calificado también como lo que es: violaciones a las libertades religiosas fundamentales. Aunque los ejemplos abundan cada vez más y provienen de todas las confesiones religiosas, fundamentalmente en sus bases, lejos de los intereses de las jerarquías, la pastora evangélica Joanna Columbié Grave de Peralta, adicionando el significativo hecho de ser una mujer, constituye un vivo ejemplo de ello.
Joanna no solo es una cristiana comprometida, sino que es también una pastora egresada del Seminario Evangélico de Teología de Matanzas y cuyo ministerio pastoral siempre fue importunado por el sistema, de lo cual podrían atestiguar sus feligreses en la iglesia independiente que funcionó en su propia casa en la localidad de Céspedes en la provincia de Camagüey. Precisamente por su compromiso cristiano fue que Joanna aceptó la honorable propuesta del movimiento político Somos + para convertirse en la directora de su Academia 1010. ¡Todo un honor para los evangélicos cubanos! - por cierto no es ni la única cristiana comprometida ni la única pastora que en su libre albedrío ha decidido integrarse a Somos +, otros muchos que igual desean auténticas libertades y pluralidad para Cuba también lo están haciendo.
El Rev. Mario LLeonart y Misionera Yoaxis Marcheco 
en visita realizada a la pastora Joanna Columbié en la sede de su iglesia
 y a su casa en Céspedes, Camagüey, Cuba.
Pero ello ha tenido un alto precio para Joanna en un país donde se penaliza la discrepancia política y donde solo el Partido Comunista posee el privilegio exclusivo, no solo de ser reconocido legalmente, sino inclusive de dirigir a su antojo los destinos de toda la nación. Y un Partido que posee por cierto una entidad dedicada por completo a controlar todo cuanto tenga que ver con religión, la Oficina de Atención a los Asuntos Religiosos del Comité Central, dirigida por la Sra. Caridad Diego Bello. Basta solo googlear brevemente con el nombre de la activista para advertir las numerosas violaciones a múltiples de sus derechos de las que ha sido objeto tan solo en el último año.
En el momento en que se escriben estas letras Joanna permanece arbitrariamente recluida en una celda desde el viernes 26 de mayo en la cárcel del Vivac en La Habana. Según las últimas noticias sus carceleros anuncian que ¡DEPORTARÁN! a Joanna a su lugar de origen en el interior de la isla, no sin antes procesarla judicialmente vaya usted a saber con cuales cargos. Quienes defienden todavía lo indefendible deben saber que en Cuba el sistema llega al extremo de deportar a sus propios ciudadanos en el interior de la isla según los guetos que ha diseñado para controlar a la población.
Las organizaciones que dentro de la isla o en el mundo se especializan en condenar las violaciones a libertades religiosas deberían tomar en cuenta casos como el de Joanna y por supuesto la situación específica de esta pastora reprimida en Cuba. Libertad religiosa va mucho más allá de tener un templo en el cual reunirse y poder hacerlo determinados días en determinados horarios de la semana, y ya se sabe que tan solo en estos términos existen cuantiosas violaciones en Cuba; pasa por supuesto también por los derechos de todas las organizaciones religiosas de poder registrarse legalmente y adquirir con ello todas las obligaciones y derechos que debería concederles una Ley de Culto que por cierto brilla por su ausencia en la isla; pero llega incluso al derecho inalienable de cada individuo no solo de creer, sino de profesarla y ejercerla; especialmente si se trata de preceptos tan justos y dignos como los del credo de Joanna. 

*Coordinador del Instituto Patmos  y Pastor de la Iglesia Bautista de Waldorf, Maryland

mayo 22, 2017

Policías a la caza de pastores en Cuba

Lo errado y constante de los ataques del régimen cubano contra los pastores, ha desatado en la Isla la furia de las autoridades, armando así un programa de cacería de pastores, líderes y todo cristiano que intente salir adelante en Cuba.
Somos muchos los que hasta hoy sufrimos hostigamiento, represión, abusos, acoso por parte de la policía en Cuba. ¿Qué hace la policía cubana persiguiendo a un pastor? Nada, esta es la estrategia, intentar poner a los pastores, apóstoles que sus iglesias van en crecimiento en la lista pública represora igual que un delincuente.
Apóstol Mario Mayin Jorge Traviesos,  pastor Juan Carlos Núñez, y Roberto Pérez en las Tunas, Castelis y Zaida en  Guama-Santiago de Cuba; así como muchos otros que en este preciso momento. Estamos amenazados de una u otra manera por la represión, acoso, amenazas e intento de intimidación por parte de la policía cubana.
Ap. Alain Toledano V.
 Movimiento Apostolicio, Cuba
Este pasado Lunes me informa  muestra asistente, que se personaron dos policías a mi vivienda para conducirme a la estación policial de la localidad, a quienes se les informo que mi esposa y yo estábamos fuera del país desde el Viernes 12 que volamos a República Dominicana.
La presencia policial en nuestra casa se repite mes por mes y varias veces dentro del mismo, tal parece como que es un plan a cumplir. Hoy denunciamos el terrorismo de Estado ejecutado por el gobierno cubano y la policía cubana contra la iglesia en Cuba y sus ministros. Hacemos responsables al gobierno cubano y a su líder, Raúl Castro, por lo que nos pueda pasar, no sólo a nosotros, sino a cada ministro que sufre en la Isla, nuestras hijas, la iglesia, todo lo que somos y tenemos; ya que siempre su interior intentó ha sido robaros todo lo que tenemos.
Como hijos de Dios, no podemos callar ante la injusticia y el pecado, porque callar significa hacerse cómplice del mal. Pedimos el cese del acoso, la represión, el terrorismo de Estado, la impunidad ante el mal y la persecución religiosa. Pedimos JUSTICIA Y LIBERTAD. Hágase saber esto al mundo, y pedimos a las organizaciones de Derechos Humanos Internacionales, y otros que reclamen al gobierno de  Cuba por esto y les exijan el respeto a la libertad religiosa y a los DDHH de cada ciudadano cubano,
Shalom.

mayo 19, 2017

Escenario religioso actual en Cuba, entre la auto represión y la represión.

Actual arena religiosa en Cuba: auto represión y represión.
Las libertades religiosas siguen corriendo la misma suerte que el resto de los derechos de los cubanos en la medida en la que el régimen recrudece su represión tras la muerte de Fidel Castro, la victoria electoral de Donald Trump, la crisis venezolana y la cercanía de las prometidas elecciones de 2018.
Llama poderosamente la atención el ¨cuidadoso miedo¨ de los grupos legalmente reconocidos, o de los que no lo están, pero que resultan relativamente tolerados. Y lo hacen en aras de intentar conservar sus reducidos espacios, al punto de callar no solo las flagrantes violaciones contra el pueblo al que están llamados a ministrar, sino las que incluso ocurren en contra de sus propios miembros e iglesias. Este temor, fuertemente perceptible, contradice la experiencia cristiana de que ¨no nos ha dado Dios espíritu de cobardía¨ y de que ¨en el amor no hay temor, sino que el perfecto amor echa fuera el temor¨; pero al igual que en otras experiencias de regímenes totalitarios constituyen una de las mayores expresiones de la represión religiosa que llega a manifestarse en la autocensura.
   
Protesta convocada frente a la Embajada de Cuba en 
Washington DC
por Home School Legal Defense Association (HSLDA)
 el 17 de mayo en solidaridad con el pastor Ramón Rigal
De otro lado preocupa el acoso a iglesias y líderes religiosos que no acatan tal sometimiento porque entienden que más que refrenarlos a ellos, el sistema a quien pretende someter es a Dios mismo.  Vale citar a vuelo de pájaro nombres de algunos de estos líderes que han sido noticias en los últimos meses como objetos de flagrantes violaciones, tanto directamente ellos, como sus feligreses, acólitos y familiares:
…Ramón Rigal (Iglesia de Dios en Cristo), Yiorvis Bravo Denis (Naciones para Cristo), Alain Toledano (Sendas de Justicia), Mario Travieso (Viento Recio), Daniel Josué Pérez Naranjo (Bautistas Bereanos), Bernardo de Quesada (Fuego y Dinámica), Juan Carlos Núñez (Rey de Gloria), Marcos Antonio Perdomo Silva (Estableciendo el Reino de Dios), Dagoberto Valdés (Centro de Estudios Convivencia), Armando Pérez (Logias Masónicas); y Leonardo Rodríguez Alonso y Félix Llerena López (coordinadores del Instituto Patmos)…
Delegation Religious Affairs Office @PartidoPCC
 meets w religious leaders & attends mass main
 chapel North Syracuse Baptist Church NYC

No se trata de casos aislados, como recientemente reconociera a AP Joel Ortega Dópico, presidente del oficialista Consejo de Iglesias de Cuba (CIC), sino que más bien pareciera ser la norma en el panorama religioso cubano que puede resumirse en dos tristes palabras que golpean a todas las confesiones cubanas en cualquiera de sus diversas denominaciones: autorepresión o represión.
Resulta en extremo bochornoso que en medio de este triste y serio panorama una delegación de quienes ejercen esta represión religiosa desde el sitio más encumbrado del poder político en Cuba, desde la Oficina de Atención a los Asuntos Religiosos del Partido Comunista de Cuba, esté siendo recibida en Estados Unidos por instituciones, incluyendo sedes religiosas, recibiendo a estos victimarios que intentan hacerse pasar como garantes y salvaguardas de lo que precisamente atacan.  

*Pastor Bautista y Coordinador del Instituto Patmos. Reside temporalmente en Maryland donde pastorea la Iglesia Bautista de Waldorf pero continúa coordinando el Instituto Patmos en Cuba. Autor del blog Cubano Confesante. Twitter: @maritovoz

mayo 07, 2017

De la muy ingeniosa dedicación de algunos católicos en Cuba para hacer valer la Cruz y la Patria.

Por: Eloy A González.
‘Viva Fidel Castro Ruz, con la Patria y con la Cruz’. ‘‘Anillo, redondel y aro… ese Padre sí está claro’; ‘Uno, dos, tres y cuatro… ese Padre sí está claro’. Vítores al cura procastrista Germán Lence el 16 agosto 1960.
Resulta equivocado y de un simplismo desastroso el tratar, de la manera tan frecuente como se hace, el contencioso ocurrido entre la Iglesia Católica y el recién estrenado gobierno revolucionario en Cuba. Esto en los primeros años de la así llamada Revolución Cubana, cuando, unos triunfantes guerrilleros se afincaban en el poder dejando a un lado los ideales y propósitos que dijeron seguir; después de conducir una guerra sobre dimensionada y objetable en el orden histórico en muchos aspectos.
P. Ángel M Rivas,
oficial y capellán del Ejército Rebelde, 
fue detenido y expulsado de Cuba.
No hay dudas que al triunfo de la Revolución, y consolidándose una dictadura totalitaria sin perder mucho tiempo, se produjo un encontronazo entre la Iglesia Católica y el gobierno que se apresuró a instaurar el inédito dictador. Las medidas fueron del todo incongruentes cuando se comenzó de inmediato a fusilar aduciendo que se estaba  haciendo justicia, esto, sin el debido proceso. Se intervinieron las escuelas católicas y se lanzaron con todo sobre la única Universidad Católica que había en el país; se reprimió  y se usaron todo tipo de descalificaciones contra el clero y los laicos católicos que fueron objetos de represalias. Una Revolución que comenzó promoviendo el odio, confiscando propiedades y bienes, llenando las cárceles de presos, controlando la Prensa y cuestionando las elecciones libres. De  los sacerdotes dijeron que eran falangistas, para no decir batistianos  y el catolicismo pues, conservador y reaccionario. Uno de tantos vítores en las calles decía: “Mi mamá no quiere que yo vaya a la iglesia/porque el cura falangista me convierte en terrorista”.
Resulta muy fácil buscan la confrontación, motivar a la población al resentimiento, establecer las premisas de una lucha ideológica y tratar de desplazar como actor primordial de la sociedad a la Iglesia; un tanto comprometido por aquello de que con la iglesia hemos dado. Los hechos pueden ser otros:
En los hechos, durante el periodo inmediato anterior y posterior al triunfo de la revolución, esto es, desde el golpe de Estado perpetrado por Batista, hasta algunos meses después de la declaración socialista de la Revolución, el catolicismo adquirió facetas muy complejas que impiden catalogar a los actores en grupos claramente delimitados con base a sus posturas frente a la revolución. El punto de inflexión no fue ciertamente la revolución, sino el carácter comunista que ésta fue adquiriendo hasta definirse como tal. La pugna comunismo vs anticomunismo puede ser y de hecho ha sido una perspectiva de lectura recurrente desde la cual se ha abordado el estudio del papel jugado por los católicos en Cuba revolucionaria.[1]
Precisamente uno de los factores que jugaron y tal vez aun juegan un papel destacado dentro de las complejas relaciones Iglesia Católica- Estado es la presencia de muchos católicos que, al inicio de la consolidación del régimen,  mostraron una  fascinación rastrera por la Revolución y sus líderes; todo esto tratando de busca un compromiso social cuestionable ante  un régimen que comenzó vulnerando los derechos fundamentales. De esta acción degradante y sombría apareció en el escenario nacional, tal vez antes de que las catervas triunfantes se hicieran del poder, una organización o grupo de católicos pro castristas denominado: Agrupación Cívica de Revolucionarios Cubanos ‘Con la Cruz y con la Patria”.
La creación y surgimiento de un movimiento que coordinara la labor y dedicación revolucionaria de los católicos cubanos dentro de la Revolución, parece haber sido una idea incubada desde los días de la lucha insurreccional, entendiendo por esto el periodo de lucha en la Sierra Maestra; pero tal vez fue antes. Una de las fuentes más reveladoras de los eventos ocurridos entre la Iglesia Católica durante la lucha insurreccional, y después, en los primeros años del afianzamiento del régimen, es el libro que sustenta las notas del padre paúl Hilario Chaurrondo de reciente lectura.[2]
Chaurrondo anota que el tiempo en que los asaltantes al Cuartel Moncada pasaron en el conocido Presidio Modelo de Isla de Pinos fue una academia de ideales. Es sabido que los revolucionarios hicieron de su estancia allí actividad intelectual fecunda, donde se preparaban y establecían las proposiciones de lo que sería una revolución triunfante y una dictadura por crear. Funcionó una academia y una biblioteca, los maestros no faltaron; tal vez en ese lugar  se  tramaron más de una idea torcida de control y represiones futuras. Ideas como la de crear organizaciones afines pudieran tener su origen en este prolongado encierro de mentes proclives a la conspiración y el engaño. Dice el prelado, quien los visito  en el presidio, lo siguiente: “En aquella soledad, que nada tenía de la tétrica escena montada por Castro, existía una academia de ideales donde se estudió hasta las entrañas, pensando y discutiendo sobre la Cuba futura, mientras se colocaban la aureola de mártires. [3]
Las cuidadosas y precisas notas del Padre Chaurrondo, demuestran que la Agrupación Cívica de Revolucionarios Cubanos ‘Con la Cruz y con la Patria”, no fue una organización que surgió de manera espontánea en el momento de entusiasmo que se vivía después de la fuga de Batista y la entrada triunfal del Máximo Líder junto a su séquito de barbudos  a La Habana. El prelado anota:
La idea de coordinar la acción de los católicos dentro de la Revolución había surgido en la resistencia, junto con un movimiento de tendencia humanista…., algunos sacerdotes trabajaban con ese movimiento a fin de constituir una agrupación laica. Se hizo conocimiento a Fidel en la Sierra de ello y este mando un agente para que organizase a los católicos en la resistencia. La idea de Fidel no era que la Iglesia se adhiriese oficialmente a la Revolución sino que organizarse servicios de ayuda y protección para las víctimas de la policía. [4]
El líder los quería de su lado, pero no con suficiente protagonismo como para que, en su momento, le movieran el piso. Tal vez por aquello de que: con los curas y los frailes, buenos días y buenas tardes; que bien que fue educado por los jesuitas.
De manera que al triunfo de la Revolución estaban creadas las condiciones para que una organización para eclesial, dentro de la iglesia católica, asumiera el protagonismo que requerían tantos católicos que se sumaron a la Revolución, sobre todo en el momento en que estaban controlando todo el poder en el país; cuando aflora siempre el oportunismo y la ruindad. La organización “Con la Cruz y con la Patria”, y muy vinculada con esta, la  Unión de Católicos Revolucionarios (UCR), ya eran parte de la Revolución que se decía de los humildes y para los humildes.
Como se creó, trabajó y quiénes fueron los que participaron en esta organización que parece venir de los tiempos de insurrección, es algo que resulta difícil de determinar porque los datos escasean. Nada encontramos en relación a la UCR.  Contamos  con una relación de las personalidades más notorias de la organización “Con la Cruz y con la Patria” o relacionadas con esta que consideramos de interés mencionarlas. Estos fueron algunos prelados que influyeron:  P. Lucas Irutagoyena OFM, P. Guillermo Sardiñas, P. Andrés Valdespino, P. Juan Ramón O’Farril, P. Eduardo Aguirre, Mons. Belarmino García Feíto, Mons. Manuel Rodríguez Rozas. Pero lo importante aquí son aquellos sacerdotes y laicos que participaron de manera directa y con notable protagonismo, estos fueron: P. Germán Lence, P. Ignacio Baín, P. Ángel Gaztelú, P. Moisés Arrechea y los laicos: Lula Hortsman (figura representativa),  Esterlina Milanés, José Márquez de la Cerra, Yolanda Appiani, Francisco Menéndez, Antonio Pena Barberá y  Antonio Pruna Lamadrid.
Esta organización se dedicó a promover la Revolución en un momento en que se originaba, dentro y fuera de la Iglesia Católica, una lucha ideológica y consecuente  confrontación  que alcanzaría su mayor auge con la expulsión de los sacerdotes y religiosas de Cuba.
El sacerdote devenido en cronista, señala que la iglesia asumía el silencio. Los franciscanos estaban decididos a defender la Revolución y los jesuitas daban la impresión de no querer terciar en la lucha…,[5]. ¿Era esto una división dentro de la iglesia?, desde luego que no.
La organización que nos ocupa dio muestra de una lealtad  para con la Revolución, que sin dudas, acarreó no pocas críticas de la mayoría del pueblo católico cubano que ya no aceptaba de buena gana una Revolución que les atacaba. Chaurrondo señala que “estos organizaron actos religiosos de tinte político sin duda”. Una misa por la salud de Fidel Castro fue particularmente notoria, en un país donde los sicarios del régimen ya se encargaban de modificarle la salud, fusilamiento de por medio, a decenas de cubanos que comenzaban a disentir del régimen. El prelado señalaba:
La organización Con la Cruz y con la Patria era un movimiento meramente laico sin pretensiones de asociación piadosa. A pesar de no estar controlados por la jerarquía funcionaban sin chocar con la Iglesia. En Santiago tuvieron dificultades con Serantes .Pero en otros lugares también enfrentaron problemas a causa de sus ideas. Uno de ellos surgió con los católicos cuando los de la organización discutían sobre la posibilidad de cantar el Himno del 26 de julio al entrar o salir de las misas.  Algunos sacerdotes comenzaron a alejarse de la agrupación  sospechando que la presidenta, Lula Horstsman estaba manejada por Vilma Espín. Cuenta Gaztelu que habiendo tomado la institución cierta disposición, esta señora dijo que para ejecutarla primero tenía que hablar con Vilma. [6]
Los miembros se está organización consideraban que hubo cierta asentimiento de la Iglesia al régimen de Batista, mostraban un discurso anticlerical y denigraban a la jerarquía  católica; y no dudaron en considerar que aquellos laicos que ya mostraban su desacuerdo con la Revolución lo hacían para desacreditarla.
En las notas del P. Hilario Chaurrondo, cuando habla del P. Germán Lence, principal líder y promotor de la organización Con la Cruz y con la Patria, este se refiere a que algunos veían a este religioso como el futuro pontífice de una supuesta iglesia católica de Cuba, independiente de Roma, la cual estaba en ciernes a pesar de la opinión  adversa de algunos.[7]
No es desacertado considerar que en Cuba, ya en los primeros años de la Revolución, se trató de repetir la experiencia de la China comunista al tratar de crear una Iglesia católica oficial (patriótica) manejada por el régimen. Esta iglesia está presente en China y es una iglesia nacional, independiente y opuesta a Roma. Dependen de una organización denominada Asociación Católica Patriota de China (CCPA). Tal vez las mentes exaltadas y de inspirada conspiración de los líderes de la Revolución, consideraron en su momento  la idea de crear alguna organización como esta de “Con la Cruz y con la Patria” apoyada en la UCR, para convertirla en una asociación de católicos cubanos “patriotas” que pudiera tener un versión para el laicado recordando  la experiencia de los “sacerdotes patriotas” polacos, también por supuesto procomunistas. Pero veamos algunos otros argumentos al respecto:
Cuando el P. Juan Ramón  O’Farril y el P. Eduardo Aguirre, quienes habían cooperado con la Revolución, escapan de la Isla, uno de ellos  supongo que el P. O’Farril declaró ante una comisión del Senado de los Estados Unidos y aseguró que “Fidel le había llegado a sugerir la creación de la Iglesia Católica Nacional sin relación con Roma”.[8]
En una reunión con algunos representantes de la iglesia católica cubana y el secretario de la  Embajada de los Estados Unidos en Cuba, el Obispo Auxiliar Mons. José Domínguez señalaba lo siguiente: “Es muy posible que los católicos pro Castro y los pocos sacerdotes revolucionarios que aún quedan; declaren que la Jerarquía no les representa y funden su propia iglesia sobre la estructura de la existente  organización Con la Cruz y con la Paria”.[9]
Por último, una nota del escritor y traductor Roger R Fernández, por aquellos días trabajando en La Habana , señalaba que “el gobierno castrista creo el movimiento Con la Cruz y con la Patria para difamar la unión católica y allanar el terreno para el establecimiento de una Iglesia Nacional, responsable únicamente ante el gobierno revolucionario”; agrega el intelectual que  el motor principal de este movimiento lo fue Osvaldo Dorticós con dos de sus abogados , Héctor Garcini Guerra y José Antonio Frías, quienes diseñaron el primer documento que mostraría al mundo que la Iglesias Católica en Cuba estaba dividida”. [10]
No sabemos de los documentos constitutivos de esta organización ni en que circunstancias desapareció de la escena pública; tampoco sabemos que suerte corrieron sus principales promotores. Pero sin lugar a dudas existió una agenda conspirativa que pudo haber venido desde los días de la academia en el presidio, los largos días de espera en medio de la lucha insurreccional y después en los primeros años de la Revolución; cuando se produjo el enfrentamiento con la Iglesia. Esa agenda u hoja de ruta,  más que crear una iglesia patriótica, de lo que se trató fue de dividir y reprimir en todo lo posible a la Iglesia;  todo esto en medio de un escenario de confrontación ideológica que terminó con la consolidación de la dictadura Castro comunista y la actitud de sobrevivencia y dedicación adocenada de la Iglesia Católica durante tantos años.
No surgió la Iglesia Patriótica, ni el P. Germán Lence fue Cardenal Primado de esta. La Revolución atacó y manipuló en lo que pudo a la iglesia Católica con la misma dedicación con que lo hizo con toda la sociedad civil cubana;  hasta que llegamos a esta situación presente y real de una Iglesia que no muestra ni va a mostrar una postura noble y consecuente.
01.05.2017©




[1] Pedroza, B. I. (2016, Noviembre 20). Catolicismo y Revolución Cubana. Retrieved April 29, 2017, from http://www.pacarinadelsur.com/home/abordajes-y-contiendas/1080-catolicismo-y-revolucion-cubana
[2] Saludes, M. (2013). Hilario Chaurrondo: Entre Iglesia y Revolución. Miami, FL: Alexandria Library.Apuntes de un sacerdote paúl español en Cuba
[3] Saludes-Chaurrondo, Op.Cit., p. 29
[4] Saludes-Chaurrondo, Op. Cit., p.57
[5] Saludes-Chaurrondo, Op.Cit., p. 55
[6] Saludes-Chaurrondo, Op.Cit., p.58-59
[7] Saludes-Chaurrondo, Op.Cit. , p.60
[8] Saludes-Chaurrondo, Op.Cit.,p. 56
[9] Uría, I. (2011). Iglesia y revolución en Cuba: Enrique Pérez Serantes, (1883-1968) el obispo que salvo a Fidel Castro. Retrieved February 29, 2017, from https://books.google.com/books. Editorial Encuentro Madrid, p. 443
[10]Fernández, R. R. (2013). Odisea hacia la oportunidad. Retrieved February 29, 2017, from https://books.google.com/books…, Palibro, pág. 93

mayo 04, 2017

EL BUEN PASTOR Y EL FALSO PASTOR

Por Alfredo M. Cepero.*
"Yo soy el Buen Pastor. El buen pastor da su vida por las ovejas". Parábola del Buen Pastor -Juan 10,1-18.
La parábola del Buen Pastor es una de las más emblemáticas e ilustrativas de la Santa Biblia porque sintetiza en muy pocas palabras el mensaje y la misión por los que vino a la Tierra el Hijo de Dios. Es la máxima expresión del amor de un pastor que sacrifica hasta la propia vida para proteger a aquellos que se le han encomendado a su cuidado. Ese mensaje y esa misión fueron expresados con vehemencia y valentía en días recientes por un prelado venezolano. El Cardenal y Arzobispo de Mérida, Baltazar Porras Cardozo, demostró ser el buen pastor del pueblo de Venezuela.
En un mensaje de conmovedoras palabras, el purpurado se despoja de sus merecidos atuendos de Príncipe de la Iglesia y se abraza a los jóvenes que se juegan la vida por la libertad de la patria. En su mensaje, Porras Cardozo deja bien claro que no está interesado en el favor de los poderosos sino comprometido con el bienestar de los desamparados y perseguidos de su pueblo, el "Juan Bimba" consagrado en la poesía y la prosa de Andrés Eloy Blanco.
Aunque no acostumbro a hacer citas demasiado largas de otros autores, en esta ocasión no puedo resistir la tentación de hacerlo. El tema es tan importante y las palabras tan elocuentes que deben de ser repetidas hasta el cansancio para que las escuche un mundo hasta ahora insensible a la tragedia de Venezuela.
El Cardenal y Arzobispo de Mérida,
Baltazar Porras Cardozo
En su mensaje a los jóvenes, emitido el 13 de abril pasado, el cardenal hace un acto de confesión patriótica cuando dice: "Yo estoy con los muchachos,..con los que se escapan de las madres, que ya no pueden atarlos a las casas… Con los muchachos que se empecinan en despertar un país dormido que solo se lamenta, un país verbo, país paz de la fea, de la sumisa…Estoy con los muchachos, porque creo en las conquistas, no en las regalías, porque soy como ellos, un poco tonto, otro bravío, o simplemente porque no me da la gana de dejarle mi país a las hienas". ¡Bravo Cardenal, Bolívar lo bendice desde su gloria eterna!
Como era de esperar, la jauría que se ha apoderado por la fuerza de Miraflores y que repite las consignas ofensivas que le envían desde La Habana, la emprendió contra el prelado. La respuesta soez expresó que: "Guiado por el demonio, el Cardenal Baltazar Porras envía carta apoyando odio y violencia de guarimberos. Rompiendo con toda regla y paradigma, los religiosos venezolanos se han dedicado a politizar la fe católica y a apoyar a vándalos que sólo buscan violencia y desestabilización".
Pero, en honor a la justicia, Porras Cardozo no es la excepción entre los miembros de la curia venezolana sino la regla. En enero de este año, la reportera en Caracas del ABC de Madrid, Ludmila Vinogradoff, daba cuenta de que: "El arzobispo de Caracas, cardenal Jorge Urosa, instó a los sacerdotes a leer en todas las misas del pasado domingo una homilía en la que animaba a los venezolanos a "no dejarse intimidar" y a "erradicar la dictadura" por la vía "pacífica y democrática". Con esto no queda duda alguna de que la Iglesia de Venezuela, a diferencia de la de Cuba, ni pide permiso ni acepta órdenes de Roma a la hora de enfrentarse a los tiranos que oprimen a su patria.
¡Qué contraste entre esta Iglesia de Venezuela erguida ante sus opresores y la Iglesia de Cuba arrodillada ante los diablos que martirizan a mi patria! ¡Qué contraste entre sus buenos pastores y nuestros falsos pastores! ¡Qué contraste entre Baltazar Porras Cardozo y Jaime Ortega Alamino! El primero confrontando a sus tiranos y el segundo al servicio de nuestros déspotas. A propósito, volvamos a la parábola del buen pastor donde hace referencia a los falsos pastores. "No así el asalariado, que no es el pastor ni las ovejas son suyas. Cuando ve venir al lobo, huye abandonando las ovejas, y el lobo las agarra y las dispersa. A él sólo le interesa su salario y no le importan nada las ovejas".
Esa ha sido la conducta de Jaime Ortega. No sólo abandonó a las ovejas encomendadas a su cuidado para servirse a sí mismo sino fue más allá. Vilipendió y despersonalizó a quienes se atrevieron a denunciar su miserable conducta. Durante una conferencia en la Universidad de Harvard, Ortega manifestó que la ocupación de la Basílica Menor de la Iglesia de Nuestra Señora de la Caridad, en Centro Habana, por un grupo de 13 opositores, fue organizada por la "gusanera" que opera desde Miami.
La realidad es que la ocupación fue una operación pacífica organizada en Cuba y que Ortega aprobó con antelación el operativo militar que puso punto final a una de las más significativas acciones de la oposición en víspera de la visita del papa Benedicto XVI a Cuba, realizada del 26 al 28 de marzo de 2012. Y en un acto de supina vileza, este Judas negó que hubieran sido sacados por la fuerza y agregó que: "Ellos eran un grupo que, me apena mucho, pero todos eran antiguos delincuentes”, afirmó Ortega. “Había un ex preso cubano que había sido devuelto a Cuba, había estado seis años en la cárcel, y fue una de las personas excluibles que fueron mandados a Cuba [...]. Había toda una gente allí sin nivel cultural, algunos con trastornos sicológicos”.
Pero la maldad de este hombre para justificar su repulsiva conducta no conoce siquiera el límite del respeto a la memoria de los muertos. En ese mismo viaje a los Estados Unidos declaró a la prensa que Monseñor Agustín Román le recomendó no mencionar la palabra reconciliación en su primera visita como cardenal a Miami en los años 80. “Román me llamó aparte y me dijo: ‘En tus discursos, en tus homilías tú hablas de reconciliación. No menciones esa palabra en Miami’”. Una frase que jamás pudo haber salido de la boca de aquel hombre santo y humilde que fue Monseñor Román y una mentira más de quien ha hecho de la farsa un modo de vida de lujos y privilegios.
Otro incidente que ilustra la perversidad de este sujeto se produjo con motivo de la celebración del 4 de julio de 2015 en la residencia del jefe de misión de la Oficina de Intereses de EE.UU. en La Habana. Un grupo de opositores, entre los cuales se encontraban el dirigente Egberto Ángel Escobedo y las Damas de Blanco Leticia Ramos y María Labrada le reprocharon que hubiera negado que hubiera presos políticos en Cuba. La respuesta tajante de Ortega: "No, para mí no hay presos políticos. Nosotros hicimos la gestión en el 2010 para sacar a los últimos presos políticos que habían y la Iglesia católica fue la que hizo eso". Acto seguido los amenazó con llamarles a la Seguridad del Estado. No creo que sean necesarios más ejemplos.
Lo que sí quiero ratificar es que esta reconciliación farisaica predicada por Ortega de las víctimas con sus victimarios es inaceptable y humillante. No puede haber reconciliación con quienes han asesinado a millares de seres humanos para preservar el poder. Además, los centenares de jóvenes que murieron por su iglesia y por su patria ante los paredones de fusilamiento gritando "¡Viva Cristo Rey! dieron testimonio de que morían por su fe en el máximo exponente de los buenos pastores, el que fue crucificado hace dos milenios en El Gólgota. Este falso pastor cubano los habrá traicionado, pero todos son tan mártires como los del Circo Romano, los de la Guerra Civil Española, los de los campos de exterminio nazis y los decapitados por el terrorismo islámico. Un día serán elevados a unos altares donde pido a Dios que no oficien sacerdotes de la baja calaña de Jaime Ortega.
La opción de la Iglesia Cubana en estos momentos es muy clara. Se une a su pueblo en la defensa de la libertad como ha hecho la Iglesia Venezolana o se prepara a pagar las consecuencias de su complicidad con la tiranía en la Cuba democrática que ya se avecina. El momento de estar del lado correcto de la historia es ahora. Después será demasiado tarde.
* Director de www.lanuevanacion.com . http://twitter.com/@AlfredoCepero
TEXTO COMPLETO DEL MENSAJE DEL CARDENAL PORRAS A LOS JÓVENES VENEZOLANOS. http://www.lanuevanacion.com/articles.aspx?art=7448

Fuente: La Nueva Nación es una publicación independiente cuyas metas son la defensa de la libertad, la preservación de la democracia y la promoción de la libre empresa. Visítenos en: http://www.lanuevanacion.com

mayo 01, 2017

Por medio de la celebración del Santo Sacrificio damos gracias al Señor por la salud del máximo líder de la Revolución en quien los cubanos depositamos nuestros anhelos y esperanzas.

Palabras pronunciadas por el Padre Germán Lence, después de la Misa de Acción de Gracias por la recuperación de la salud del compañero Fidel Castro ,celebrada en el Anfiteatro municipal de la Avenida del Puerto el 16 de agosto de 1960.
Ofició la ceremonia  el padre Germán Lence, organizador de la Agrupación Cívica de Revolucionarios Cubanos ‘Con la Cruz y por la Patria’, auxiliado por el niño Armando Pruna, hermano de uno de los mártires de la Revolución. […]. Como fondo de la imagen de la patrona de Cuba, la Virgen de la Caridad y del Crucifijo que se encontraban en el altar, estaba la bandera cubana extendida. Aquí las palabras:
Pueblo católico de Cuba:
Conscientes del momento histórico que viva la Patria, e impuesto del sentimiento profundamente cristiano de pueblo cubano, hoy nos reunimos al pie de este altar, en cuya ara hemos ofrecido a Dios nuestro Señor del Santo Sacrificio de la Misa, en la que rememoramos el Sacrificio del Redentor: Cristo, que tanto ama a los humildes y a los niños; Cristo, que regó el suelo patrio con su sangre salvadora de rescate de la humanidad; Cristo, que por decir la verdad y enseñar la humildad, el amor al prójimo y a su tierra por la que derramó lágrimas; padeció la incomprensión humana, siendo finalmente clavado en la cruz infamante, como vulgar ladrón.
Por medio de este Santo Sacrificio, hemos dado gracias al Señor por haber devuelto la salud al máximo líder de la Revolución Cubana, doctor Fidel Castro Ruz, en quien los cubanos hemos depositado nuestros anhelos y esperanzas de que continúe conduciendo nuestra Patria por el recto y seguro camino de la justicia social.
Al mismo tiempo hemos rogado a nuestra Patrona la Virgen de la Caridad del Cobre, que desde los inicios de nuestra nacionalidad tiene un altar en el corazón de cada cubano, para que lleve en sus manos maternales nuestras rogativas a Dios Nuestro Señor, a fin de que esta tierra hoy libre y soberana de Cuba, realice sus destinos de Justicia y Caridad, consolidando lo que es ya ejemplo y libertad en el concierto de las Naciones del Mundo.
¡Viva Cuba Libre y Soberana!
¡Viva Fidel Castro!
Los aplausos fueron reemplazados por pañuelos que fueron agitados en el aire y el pueblo entero acabó proclamando. ¡Cuba sí, yanquis no! Después de cantar el Himno Nacional. Finalmente todos los asistentes se trasladaron al Palacio Presidencial, siguiendo el Padre Germán Lence y a las damas de la comisión organizadora.

Fuente: Periódico Revolución , La Habana , 17 de agosto de 1960