Consejo
de Iglesias de Cuba
Declaración
En
ocasión de su XLV Asamblea General .23 – 25 de mayo del 2012
“Bienaventurados
los pacificadores, porque ellos serán llamados hijos de Dios”. Sn. Mt. 5,9. “La
misericordia y la verdad se encontraron; la justicia y la paz se besaron”.
Salmos 85,10.
1) El Consejo de
Iglesias de Cuba, fundado en 1941, y que en la actualidad agrupa a 48 miembros,
entre miembros plenos (37), observadores (5) y asociados fraternales (6), y que
comprende iglesias (33), instituciones y movimientos ecuménicos (13), así como
otras religiones no cristianas (2), celebró su XLV Asamblea General, durante
los días del 23 al 25 de mayo de 2012, cuando cumple el aniversario 71 de su
fundación.
2) Al reunirnos para considerar aquellas
materias propias del funcionamiento de nuestra organización, no podemos ignorar
el entorno local e internacional en el cual desarrollamos nuestro trabajo y
misión, y tenemos nuestros compromisos.
3) Es nuestra
preocupación principal las actuales amenazas a la paz mundial. El fruto más
preciado de la justicia siempre será la paz. La justicia y la paz son un don y
una bendición de Dios para la humanidad y para toda la creación.
4) El mayor
enemigo de la paz es la avaricia de las personas y las naciones que no respetan
los derechos del ser humano y los de otras naciones.
5) La avaricia es el mayor pecado de los que
se rebelan contra los propósitos de Dios de paz y bienestar para todo el género
humano. El pecado de la avaricia se manifiesta en la acumulación de riquezas y
de poder por parte de unas pocas personas y naciones, en detrimento de las
grandes mayorías de los pueblos del mundo. El método de la avaricia es el lucro
desmedido con desprecio por los derechos de la humanidad a una vida digna.
6) Por lo que el Consejo de Iglesias de Cuba
condena la injusticia y la avaricia que practican aquellas naciones poderosas,
especialmente las que han desatado, en los años más recientes, guerras para el
saqueo de los recursos naturales de naciones empobrecidas, y por el control de
sus territorios estratégicos, en una puja por el dominio total del mundo, y
que, irresponsablemente, lo llevan al borde de un holocausto nuclear global.
7) Durante estos dos últimos años, el Consejo
de Iglesias de Cuba y el Consejo Nacional de las Iglesias de Cristo en los
Estados Unidos, hemos trabajado estrechamente para propiciar un clima de paz y
entendimiento, para que podamos alcanzar, en un futuro no muy lejano, la
normalización de las relaciones entre nuestros dos países vecinos, dentro de
los cuales nuestras iglesias comparten una historia común.
8) En este sentido, en diciembre de 2011,
ambos consejos nos pronunciamos, mediante una Declaración Conjunta en ocasión
de la visita a Cuba de la delegación de más alto nivel que jamás nos haya
visitado, en el sentido de nuestra resolución de dar continuidad a nuestro
trabajo, que contribuya a la normalización de relaciones entre nuestros dos
países.
9) Asimismo reconocemos que,
independientemente de posiciones subjetivas de las partes, persiste el hecho
concreto del bloqueo a la economía, el comercio y las finanzas de Cuba por
parte del gobierno de Estados Unidos.
10) Algunos han expresado que las tácticas y
estrategias de bloqueos económicos, comerciales y financieros contra pueblos y
naciones son una opción política. Pero estamos convencidos que los bloqueos
económicos, comerciales y financieros contra los pueblos son medidas anti
éticas, que contravienen la voluntad de Dios, quien, desde el mismo acto
creacional, dio las provisiones necesarias a la humanidad para crecer y
multiplicarse. Así que tales medidas nada tienen que ver con opciones
políticas, sino que son medidas criminales y genocidas.
11) Por lo que el
Consejo de Iglesias de Cuba se une a las iglesias, consejos de iglesias,
personalidades y políticos de todas partes del mundo, y especialmente de
Estados Unidos, así como a las resoluciones de las asambleas generales de
Naciones Unidas, que piden el cese del bloqueo, como necesidad para la
normalización de relaciones entre Cuba y Estados Unidos.
12) El lema del Consejo de Iglesias de Cuba:
UNIDOS PARA SERVIR, permanece vigente, y como un desafío para nuestra
identificación con las luchas y esperanzas de nuestro pueblo, especialmente en
este proceso de actualización de la economía, y saluda la ampliación de una
mayor participación en ella de cientos de miles de cubanos y cubanas con
iniciativas propias; y, especialmente, esperamos el fortalecimiento del
cooperativismo, como expresión de la participación comunitaria en la solución
de las dificultades productivas y económicas, acorde con el evangelio.
13) El ser ecuménico está íntimamente unido al
servicio, dentro de un pueblo diverso y sin discriminaciones.
14) El ecumenismo practicante es el compromiso
y la acción concreta de acompañamiento al pueblo, a la familia y a la comunidad;
es la vocación de unir nuestros esfuerzos y nuestra fe en medio de nuestra
diversidad, dando testimonio de unidad cristiana para que Cuba crea que somos
embajadores de Jesucristo, embajadores del amor, la paz y la justicia.
15) Con este
espíritu, cerramos nuestra cuadragésima quinta Asamblea General. Saludamos al
pueblo cubano —del cual somos y al cual nos debemos—, con un saludo cargado de
esperanza y deseos de paz y bienestar, como manifestación concreta de las
bendiciones que Dios derrama sobre todos sus hijos e hijas en esta amada
Tierra.
La Habana, 25 de mayo del 2012, A.D.
Fuente: Consejo de Iglesias de Cuba.
No hay comentarios:
Publicar un comentario