octubre 26, 2021

Brigadas de Violencia Rápida.

 

Hace varios años escribí un articulo con el título de: ¿Qué es un Acto de Repudio? Estaba dirigido a las personas que no son cubanos y trataba de explicarles el significado de tan aberrado proceder. Fue publicado en un periódico local donde resido (EE. UU.) y más tarde en varios sitios de temas cubanos. Es algo que no pierde vigencia como no pierde vigencia la dedicación a tanta impiedad de buena parte de la sociedad cubana. Ahora, muy actual, este articulo del padre Alberto Reyes; cuando soplan vientos en Cuba de confrontaciones, violencia y odios exacerbados. Recomiendo la lectura de ambos artículos.

Brigadas de Violencia Rápida.

Por: Padre, Alberto Reyes. *

 Desde que tengo uso de razón he escuchado que vivo en un sistema social diseñado no sólo para servir al pueblo sino para darle a ese pueblo el mejor de los presentes y el mejor de los futuros. Durante años nos lo creímos, o fingimos creerlo, mientras veíamos cómo el presente de muchos pueblos, vecinos y no vecinos mejoraba, y nosotros parecíamos retroceder en el tiempo, a la par que comprendíamos que “el pueblo” no se refería a toda la población sino a aquella parte que seguía aplaudiendo y aguantando. La otra parte, la que protestaba, la que se quejaba, la que emigraba…, fue siempre sistemáticamente ignorada, desprestigiada, excluida, reprimida.

 Fue en esa vasta metodología orientada a despojar a muchos de su membresía de “pueblo”, donde surgió la idea diabólica de las llamadas “Brigadas de Respuesta Rápida”. Presentadas con la mítica y falsa propaganda del “pueblo enardecido que defiende su Revolución”, se cruzó un límite que nunca debió ser cruzado y que no debe ser cruzado por ninguna sociedad: enfrentar a hermanos contra hermanos, atacar a tus vecinos, a los tuyos, a tu propio pueblo.

 Hoy, cuando mucha gente nacida en esta tierra y parte de este pueblo alza la voz para pedir cambios a través del diálogo y del entendimiento pacífico, se vuelve a acudir a lo peor del ser humano: la violencia contra su propio hermano.

 Pero ¿quién convoca a la violencia? Rostros conocidos pero anónimos, personas que nunca saldrán en una pantalla diciendo ni siquiera frases tan ambiguas como: “¡Defiendan a la Revolución!”. Cuando términos como golpear, agredir, reprimir se sobreentienden, podemos recurrir a los eufemismos del lenguaje. Pero nada de eso será dicho por los que tienen autoridad para decirlo, porque eso se llama “trabajo sucio”, y el poder real se cuida muy bien de no dejar huellas acusatorias.

 ¿Quiénes están haciendo el “trabajo sucio”? Los mandos intermedios, personas encargadas de prepararlo todo pero que tal vez tampoco entrarán en acción: convocarán, mandarán a otros, empujarán, vigilarán desde las esquinas, pero tal vez se cuidarán muy bien de no salir nunca en una foto golpeando a otro junto a un cartel que diga: “¡Represor!”.

 Al final, ¿quién tomará el bate y expondrá su rostro?, ¿quién levantará el puño contra el hermano?, ¿quién venderá su alma al diablo hundiéndose en el mal irreflexivo?, ¿quién saldrá en una foto en Facebook con una nota que diga nombre, dirección y el calificativo de “represor”? Los de abajo, la masa desechable, los tontos útiles, los prescindibles, aquellos por los cuales, si se vira la tortilla, nadie moverá un dedo para defenderlos. O tal vez, personas que no quieren hacerlo, pero que sienten un miedo atroz a plantarse y a decir: “¡no lo voy a hacer!”, o personas que de tan comprometidas con el “sistema” se debaten en lo que la psicología llama “conflicto de lealtades”.

 Yo entiendo, entiendo los miedos, entiendo los conflictos de lealtades, entiendo la fuerza de la presión ejercida desde posiciones de poder, pero creo firmemente en la libertad intrínseca del ser humano, creo en la capacidad humana de elegir la luz, creo en la fuerza del bien en la conciencia que permite tirar el bate a tierra y decir: “¡no lo voy a hacer!”.

 Y el momento para tomar esa decisión es ahora, no delante de un pueblo gritando “¡libertad!”. Porque cuando se está delante de un pueblo que se ha levantado para reclamar sus derechos, los miedos se despiertan, y las alarmas se disparan, alimentadas por el instinto innato de la propia supervivencia. Y cuando esto llega, el alma viene absorbida por el túnel oscuro de la violencia.

 Todo en la vida tiene un precio. Ser libre, tiene un precio, y ser esclavo también. Servir al poder y hacer el “trabajo sucio” tiene un precio, como lo tiene plantarse y no dejar a otros que te usen para agredir. Salir a golpear a tus hermanos, tiene un precio; decir “no” o, al menos, quedarte en casa, también lo tiene. Todos tendremos que pagar por lo que elijamos, pero eso ni se piensa ni se decide en medio de una multitud. Este es el momento, el hoy, el ahora, el presente todavía sereno es el momento de reconocer que tu opción política, sea la que sea, es válida y tienes derecho a defenderla, pero lo que no es válido, lo que es inadmisible, lo que no es un derecho, es que para defender tus opciones elijas la violencia y levantes el puño armado contra tu hermano.

Fuente: Facebook

*Padre Alberto Reyes Pías nació en Florida, Camagüey. Estudió Psicología Pura en España, antes de entrar al Seminario estudió 3 años de Medicina (en Cuba), lo dejó para entrar en el Seminario. Párroco en Esmeralda, Camagüey.



octubre 21, 2021

Cuba: Seamos todos protagonistas del Cambio.

 

En el día de hoy el  régimen cubano citó a varios miembros de Archipiélago a las fiscalías de las provincias que notificaron la voluntad de realizar la Marcha Cívica por el Cambio, vertiendo sobre nosotros todo tipo de acusaciones por el mero hecho de ejercer un derecho constitucional. Esto ocurre después de varios días de hostigamiento y represión contra los miembros de la Plataforma, que van desde interrogatorio, amenazas  hasta expulsiones laborales.

Hoy el poder autoritario ha demostrado explícitamente y en toda su magnitud su rostro dictatorial, empleando a la Fiscalía para amenazar e intimidar a los ciudadanos, cuando su rol legal se basa en cuidar el ejercicio de la legalidad y el derecho constitucional. Los miembros de Archipiélago hemos decidido marchar, solo nos quedan nuestros cuerpos, el poder quiere cortar nuestras ganas de hacer camino a la democracia.

Reafirmamos  que  la Marcha Cívica por el Cambio  es propiedad intransferible del Pueblo Cubano, de todo hijo  de nuestra nación donde quiera que esté. El autoritarismo podrá apresar a los moderadores de la Plataforma, pero no los deseos de cambio y libertad de todo un pueblo.

Marchemos el 15 de noviembre, porque el futuro tiene que ser distinto, seamos todos protagonistas del Cambio.

#15N

#YoMarcho

#El15NYoMarcho

#CubaEsDeTodos

#TodosSomosArchipielago

Fuente: Facebook


octubre 18, 2021

Guarda tu corazón.

 Hoy es tendencia o “trending topic” en la conocida red social Twitter un versículo bíblico. Esto resulta inusual en tanto que centrar la atención de tantos en una breve idea de la Biblia puede sorprendernos. En realidad, este libro que significa tanto para los cristianos no se lee tan frecuente y sus postulados no son muy tenidos en cuenta.

Este es el "trending”: # Christians pray from Proverbs 4:23/ Los cristianos oran a partir Proverbios 4:23 /

Sobre toda cosa guardada, guarda tu corazón; Porque de él mana la vida. Proverbios 4:23 (Reina-Valera 1960)

Keep your heart with all diligence, for out of it spring the issues of life. Proverbs 4:23 — The New King James Version (NKJV)

Desde luego cuando usted accede a un tema que resulta tendencia en Twitter debe de preparase par las tergiversaciones, manipulaciones y burlas de todo tipo; esta tendencia no es una excepción. Lo excepcional es que se haga tendencia y muchos asumen opiniones acertadas y breves análisis interesantes.

Guardar el corazón es una exhortación, como muchos proverbios que traen una sabiduría en breves frases. nos exhorta a guardar nuestro corazón, porque es un lugar importante y focal en nuestra identidad de ser hijos de Dios. Así como, en nuestra nueva vida en Cristo, es necesario seguir esta orden para que se cumpla el propósito que el Padre estableció en el Señor para todo aquel que lo sigue.

De manera entonces, que es importante conocer en profundidad las razones por las que Dios nos pide que cuidemos o guardemos nuestro corazón. Este corazón ama, confía en el Señor y teme a Dios; en lo posible vive sus experiencias desde la fuerza del espíritu.

Otras versiones traducen este verso diciendo felices y bienaventurados los que tienen limpia la conciencia. Porque del corazón .., cuidado o descuidado sale cosas buenas o malas, argumentan.

Si ha tantos ha motivado este versículo de Proverbios en Twitter, bien puede hacerlo con usted…, entonces si quiere opinar, hágalo.

octubre 08, 2021

Las calles son de los que van tras la justicia y el amor.

 Por: Eloy A González.

Encomienda al Señor tu camino; confía en él, y él actuará. Hará que tu justicia resplandezca como el alba; tu justa causa, como el sol de mediodía. Salmo 37:5-6

En Cuba las calles no son el espacio público habitual en una nación, nos repiten con la arrogancia de los que detentan el poder y asumen el control de la sociedad que, “las calles son de los revolucionarios”. Hay en esto una específica advertencia que inquieta y genera una peligrosa preocupación.

Los que desgobiernan en Cuba en contra de la voluntad popular, estar muy preocupados. Carentes de credibilidad y despreciados por buena parte de la gente del común; están atemorizados desde que se produjeron las manifestaciones del 11J. Esto dejó un saldo de muertos, heridos, detenidos y desaparecidos; resultado de la calamitosa realidad y el desprecio por el derecho que nos alcanza a todos los cubanos. El 11J nos provocó una impronta de dolor que no conseguimos describir, mostró el rostro de un estado fallido y de un régimen agazapado en la represión y la impiedad manifiesta.

Sorprendidos y partícipes por igual, muchos cristianos se vieron clamando a un Dios que parecía olvidado; pero que no esconde su rostro y asegura que contesta cuando, en un pedido que desgarra la conciencia, le reclamábamos. Así hicieron muchos.  Porque de eso se trataba, de elevar  nuestras voces con vehemencia; de los que compartimos una común Fe y nos duele Cuba como Patria tan distante como presente. Cuando arreció la represión nos tocó llorar con los que lloran, somos parte de esas lágrimas de sufrimiento y enojo; somos parte de esa ira de nación que esperamos que, no se ponga el sol para superarla.

Porque la justicia ha sido despreciada en tribunales ilegítimos y jueces inicuos; la rectitud se mantiene a distancia en buena parte de una población marcada por la desidia; la sinceridad tropieza en un camino sembrado de indecorosa dedicación y dejación de la honradez. La intolerancia, la crueldad y el menosprecio del semejante es arrogante consagración de los que asumen un poder que nadie les ha dado.[1]

Reclaman las calles, dan cuenta de los que nos pertenece; asaltan el alma nacional y promueven los peores instintos y abyectas pasiones para fomentar el odio entre los cubanos y preparar el terreno para la irracional represión, el bandidaje y el crimen.

Advierto de la peligrosa actitud contenciosa que veo venir en los próximos días. De esta realidad, de la cual no está exenta el pueblo de creyentes en Cristo Jesús, que mira con conmiseración y enojo como es despreciado el pueblo del cual son parte.

Lideres cristianos en Cuba hacen un llamado, en el Espíritu Santo, para tener a bien unir a la iglesia de Cristo en un tiempo de clamor por la salvación, unidad y sanidad de Cuba. Dios tiene un plan de salvación para nuestra tierra, y entendemos que nos guía a ser un instrumento que anuncie este momento sin precedentes en la historia de la iglesia cubana, aseguran.

He visto, en medio del asombro y la Fe, a decenas de cubanos de distintas denominaciones, de rodilla en las calles y aceras, orando, siendo de un mismo sentir. Muchos han criticado que hagan dejación de sus templos y casas cultos para orar en las calles. Argumenta aquello de que “cuando oren, no sean como los hipócritas, porque a ellos les encanta orar de pie en las sinagogas y en las esquinas de las plazas para que la gente los vea…,” [2]; resulta por demás estas críticas algo suspicaces en medio de un pueblo que clama a un Dios porque les restituya la confianza en que mejores tiempos vendrán. Sé de muchos cristianos que, puestos los ojos en su Patria lastimada elevan sus oraciones también en el silencio de su Padre que está en lo secreto. Por lo demás, ¿por qué las calles no son también de los que confiesan una común Fe en Cristo Jesús Señor y hacedor de Paz?.

Para los cubanos distantes, nos toca también elevar nuestro clamor a Dios, ser solidarios con los que andarán las calles; orar y ayunar como bien convenga. Cuando este domingo nos demos cita en las iglesias tomemos un momento para pedir oración por Cuba y los cubanos; compartamos un común e intenso sentir por nuestra Patria distante y atribulada.

La sociedad civil, el pueblo sin protagonismo ni insidiosa consagración; ha convocado a una manifestación pacífica para el próximo 20 de noviembre[i]. Viene antecedida por una jornada de ayuno y oración que se ha pedido de manera insistente al pueblo de creyentes con la esperanza de que nada ocurra a los que se manifiesten de manera pacífica el próximo 20 de noviembre en las calles de las principales ciudades de Cuba. Algunos han pedido una jornada de oración y hacen un llamado a  la reconciliación y el respeto a la dignidad humana, en especial a cuidar la vida de los manifestantes. Estos los cristianos, piden que se acerquen a los que piden justicia por que “Nuestro Señor Jesucristo nos invita a vivir en consonancia con los signos de los tiempos y caminar hacia la justicia”. Esto es lo que quieren, “que fluya el derecho como las aguas, y la justicia como arroyo inagotable”.

Hay también muchas personas, creyentes y no creyentes, que han cerrado sus puertas y han comenzado a ayunar. Hay una consagración a la entrega por el prójimo y a ser parte de un empeño que sin duda es agradable a Dios. No hay en ellos un mensaje que muestre proselitistas intenciones e hipócritas consideraciones. Están en soledad y abandono recordando a los que hoy están presos y perseguidos.”  “Los que ayunan así brillarán como la luz de la aurora, y sus heridas sanarán muy pronto. Delante de ellos irá la justicia y detrás de ellos, la protección de Dios” Isaías 58

El régimen de terror ha detenido a muchos supuestos organizadores, lo han atenazado con amenazas y golpes para que trasmitan el mensaje de terror que quieren hacer llegar a muchos. Como colofón para completar una amenaza de represión, cárcel y torturas han llamado a un ejercicio militar que comprometerá a toda la nación y a todos los estamentos militares y órganos represivos del país. El crimen esta siendo concretado de antemano.

¿Marcharan los que claman por justicia?, ¿Cuántos y donde optaran por la senda de los justos?. No sabemos; hoy solo sabemos de odios, amenazas, soberbia y ceguera absurda de los que tienen el poder y lo han pervertido.

Creo que, con independencia de cómo y cuándo y de qué forma se producirán los acontecimientos que están por venir; serán bienaventurados los que andarán las calles, porque la justicia les antecederá y la protección de Dios les alcanzará.

Mas temprano que tarde a los cubanos nos espera un amanecer, ese que se completa cuando el día es perfecto. Cuando se haga justicia, “su  efecto será la paz; y la labor de la justicia, reposo y seguridad para siempre.” Isaías 32:17.

Preparémonos para el día nuestro, un día como para reconocer que todos seremos parte de una celebración de la cual hablaran las generaciones futuras. Seremos aquellos que aceptamos el reto de levantar una nación y lo hicimos. De nosotros dirán: “vean aquellos que han sabido ser reparadores eficaces de un país arruinado, observen con que entusiasmo y honradez se empeñan en reconstruir su hogar nacional”. Dios, viéndonos, no tendrá reparo alguno en asegúranos que será su alegría cuando asumamos la gobernanza de una Patria[3] que habíamos perdido y que esperamos compartir con todos y para en bien de todos.

Pero…, por lo pronto en los próximos días; las calles serán de los que van tras la justicia y el amor.

octubre 8, 2021

 

 

 

 



[1] Isaias 59:14-15 DHH94I

[2] Mateo 6:5-6

[3] Isaias 58:6-9



[i] Cuando estoy terminando este articulo aparece una información donde da cuenta que: El grupo Archipiélago ha anunciado este viernes a las 3 pm en conferencia de prensa vía Telegram que adelantará la fecha de la marcha programada para el día 20 de noviembre dado a la resolución que firmó el presidente Díaz Canel donde declara esa misma jornada como día de la defensa nacional. En pos de mantener la marcha pacífica el grupo ha decidido que bajo ningún concepto será cancelada, por lo que ha reajustado su fecha y entregado en La Habana la carta que así lo indica a las autoridades cubanas. La nueva fecha es para el 15 de noviembre próximo

octubre 06, 2021

Un llamado a la reconciliación y el respeto a la dignidad humana, en especial a cuidar la vida de los manifestantes del 20 de noviembre próximo.

 A los miembros de las Comunidades Cristianas presentes en Cuba y la Diáspora:

Nosotros, sus hermanos en Cristo Jesús, unidos por la fe en la acción pacificadora del Espíritu Santo y sintiendo la ternura de Dios Padre, en un signo de comunión evangélica les pedimos mediante este mensaje su apoyo con la oración y  cercanía a la marcha cívica convocada por un grupo de ciudadanos de nuestra sociedad civil. Esta marcha tiene como objetivo exigir la liberación de los presos políticos y la necesidad de cambios reales, que democraticen la vida de la ciudadanía, desterrando toda expresión de autoritarismo que lacera los derechos de los cubanos.

Hermanos, Nuestro Señor Jesucristo nos invita a vivir en consonancia con los signos de los tiempos y caminar hacia la justicia. En estos momentos los niveles de represión en nuestra Patria son cada vez más elevados: actos de repudios, destierros, encarcelamiento político, cercos policiales, represión laboral entre otros métodos. La respuesta cristiana al autoritarismo de estado debe ser la llamada a la reconciliación y el respeto a la dignidad humana, en especial a cuidar la vida de los manifestantes del 20 de noviembre. La fe cristina nos invita a amar al prójimo. En Cuba hoy se necesita dejar a un lado toda expresión totalitaria y caminar a la democracia.

Varias Iglesias instaron después de la represión gubernamental del 11 de julio al cese de la violencia, los procesos sumarios y el cuidado de la persona humana, siendo desoídas por las autoridades, pero aún poseemos la oración, que es nuestra principal ofrenda a la Patria. Así invitamos a nuestros hermanos de todas las denominaciones cristianas, allí donde estén, a acompañar con su oración al Señor el desarrollo de la Marcha, así como a reflexionar sobre la necesidad de los ejercicios de civismo como camino a la democracia y la reconciliación.

Fraternalmente:

Firman mas de 25 personas y esta información puede ser  consultada en el sito de Facebook de la comunidad “Pensemos Juntos”