diciembre 06, 2019

Sobrina de Fidel Castro llama a acciones contra las grandes iglesias evangélicas cubanas.


Por: Elena Oliveira Pérez
“Hay mucho dinero, sobre todo proveniente del gobierno de los Estados Unidos hacia cinco iglesias evangélicas principales, que son las que están tratando de sabotear muchas iniciativas”, dijo Mariela Castro, refiriéndose a la Liga Evangélica de Cuba, y las iglesias Bautista Oriental y Occidental, Metodista y Asambleas de Dios.
Estas denominaciones protestantes fundaron la Alianza de Iglesias Evangélicas de Cuba (AEIC), al margen del castrista Consejo de Iglesias de Cuba, y hasta ahora ilegal para el gobierno.
Están utilizando este término de la ideología de género, que fue creado por un obispo católico en los 60, justamente para desacreditar los avances internacionales en el campo de los derechos de las mujeres y el pensamiento de origen marxista con relación a esta temática”, contestó Castro a una entrevista del medio oficialista CubaSí.
LA REVOLUCIÓN SE DEFENDERÁ
Y nuestra Revolución, como dijo Fidel, tiene derecho a defenderse, tiene derecho a defender sus conquistas sociales, los derechos que se ha logrado refrendar en la Constitución y en todo el sistema legislativo que está siendo ya cambiado a partir del cambio constitucional”, sostuvo la directora del estatal Centro Nacional de Educación Sexual (CENESEX) principal promotor de la agenda de género en la incidencia política nacional.
Las iglesias evangélicas dentro de Cuba reciben ayuda económica de distintas organizaciones afines con el trabajo eclesial para sostener programas de atención a personas con enfermedades terminales como el VIH y cáncer, a reclusos y sus familias, así como a jóvenes y adolescentes en riesgo de exclusión social y a parte de la creciente población de ancianos en la isla.
Sin embargo, la sobrina del dictador Fidel Castro hace referencia -sin mostrar una sola evidencia- a supuestos fondos entregados por la Casa Blanca para desestabilizar el país, una reiterada acusación para tratar de desacreditar a cualquier organización o individuo que se manifieste contrario o paralelo a su agenda.
Al tiempo, Castro es cuestionada por haber desviado, supuestamente, millones de dólares de ayuda del PNUD para campañas comunicativas y acciones de CENESEX.
UNA HISTORIA VIEJA
El gobierno cubano ha considerado desde los sesentas a los creyentes como inadaptados del nuevo modelo social comunista y a la religión como “el opio de los pueblos”, siguiendo la doctrina marxista.
Así, envió a cientos de cristianos a campos de concentración conocidos como UMAP (Unidades Militares de Ayuda a la Producción)  entre 1965 y 1968, prohibió la actividad política pública para miembros de las iglesias y vedó la entrada de religiosos a determinadas carreras universitarias.
Actualmente ha prohibido viajar a los líderes evangélicos que fundaron la AEIC, al tiempo que los ha citado para amenazarles e interrogarles en dependencias policiales.
Ante la organización de un amplio sector poblacional con una agenda diferente a la del régimen y con los evangélicos al frente dice Castro en la entrevista: “tenemos que unirnos, hacer alianzas, porque cada vez que hacemos alianzas y nos unimos, logramos efectividad, logramos realmente cambios”.
La comunidad evangélica fue el principal sector de la sociedad civil que se opuso a la recién aprobada constitución comunista donde poco más del 13 por ciento de la población dijo No o se abstuvo durante la consulta popular.
Nota: artículo recibido desde Cuba por correo electrónico.

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