CORRALILLO, Cuba, febrero, 2013
www.cubanet.org -La violencia política y la
presencia de las fuerzas represivas en el panorama cubano empañaron el pasado
mes, una vez más, la obra cristiana del pastor evangelista Rolando Ramón
Felipe, quien, en homenaje al Día de Reyes, intentó organizar para los niños
una pequeña fiesta en el parque del poblado del central azucarero José René
Riquelme, municipio de Quemado de Güines, provincia de Villa Clara.
Después de trabajar durante más de tres meses dentro de toda la agrupación
cristiana y no cristiana de su comunidad, Ramón Felipe había logrado recaudar
los fondos necesarios para aquella pequeña actividad que quería dar como
sorpresa a los niños en su día. Reunió juguetes, confituras, piñatas. También
convocó a varios artistas cristianos y no cristianos de algunas localidades
cercanas para que animaran la fiesta.
Sin embargo, en el corazón mismo del poblado azucarero, y delante de
una enorme cantidad de público que se reunió allí para ver a los payasos, los
juegos y los niños disfrazados, recibió la primera advertencia de quienes, con
odio y quizás con envidia, comenzarían a acosarlo dentro de la propia actividad
cristiana.
Cuando se percataron de que el pastor continuaba con sus niños y su
fiesta, sin hacer ni un ápice de caso a la agresiva advertencia de que
“recogiera los bártulos y se perdiera de allí con todas aquellas payasadas…”,
apareció entonces la policía con su aparatoso equipamiento para meter miedo.
Los colores, olores, sabores y sonidos que tanta viveza, alegría y
colorido estaban aportando a la comunidad allí reunida y a la gran cantidad de
niños que habían acudido, fueron escapándose del lugar, como si aquello se
hubiera convertido de pronto en un campo listo para la batalla. Los niños, al
ver a los agentes de la Seguridad del Estado con sus caras roñosas, se fueron
retirando de la mano de sus madres.
La presencia de las fuerzas gubernamentales no fue recibida con
vítores, sino con miedo, espanto. Y también con el acostumbrado comadreo entre
los pobladores, sobre la forma inhumana en que terminaron llevándose al pastor
Ramón Felipe, a paso forzado, para el cuartucho de la unidad de la PNR, para
que mostrara –si es que lo tenía- la autorización del gobierno para realizar
aquella fiesta, que era de Dios y no del gobierno.
La compañía de artistas y observadores no abandonaron al pastor, como
lógicamente hicieron algunos niños con sus madres, sino que salieron, como no
esperaban los pejes gordos, a paso cerrado y en forma de una procesión, detrás
de Ramón Felipe, en un apoyo solidario, e identificándose totalmente con su
causa cristiana y festiva.
Según el cotilleo del público, los represores le gritaban al pastor
que él no era ningún líder, y que ellos sí sabían lo que él se traía entre
manos, pues ya estaban cansados de verlo montando esas “escenitas cristianas”
cada vez que le convenía hacerlos quedar mal.
La música y la algarabía cesaron. Y en muy corto espacio de tiempo el
parque pasó a ser un campo de desolación dentro del pueblo. Mucho más cuando
Juana Esther Rodríguez, madre de uno de los niños que actuaba, tuvo que salir
urgente para el Cuerpo de Guardia del policlínico con su hijo, aún disfrazado
de Melchor, porque en la carrera de huida atemorizada que hizo se cayó y hubo
que coserle una herida en la rodilla.
Más de tres horas mantuvieron encerrado al pastor, acosándolo a
preguntas, chantajes y amenazas. Ahora Ramón Felipe ha redactado un manuscrito
dirigido al gobierno de La Habana, planteando la queja y el ultraje social y
psicológico al que fue expuesto como representante de su iglesia, delante de
los niños y familiares que lo acompañaban ese día en la celebración. Veremos
qué le responden desde el gobierno, si es que le responden.
*Poetisa, Narradora y Artista Independiente de la
Plástica. Su obra La Hija del Agua (Relato, Editorial Capiro) marcó su carrera
literaria. Autora de libros como Ana de mis amores (Edición AtomPress), Mujeres
Raras (Edición AtomPress). Así como La Hija del Agua en Atom Press, Estados
Unidos. Textos como Ojalá te llamaras María, Estoy loca por ti, Es bueno decir
te quiero, Toma café conmigo, El día que voló la amapola y La Plegaria de la
Yerbabuena se encuentran inéditos. Premios y Menciones en diferentes Talleres
Literarios municipales y provinciales, y en diferentes concursos literarios. Ha
publicado textos en diferentes periódicos y revistas nacionales y extranjeros.
Ha realizado diferentes exposiciones de sus obras plásticas. Actualmente se
encuentra escribiendo un libro titulado Los Gatos de la Noche, novela corta,
muy contemporánea.
Sin comentarios!!!!!! Dios bendiga y fortalezca al pastor Felipe...
ResponderEliminarExcelente, bendiciones... sigan adelante
ResponderEliminarExcelente, sigan para adelanate, que Dios los bendiga
ResponderEliminarQuisiera comunicarme con el editor de esta blog pero no se como hacerlo porque no conozco su email, por favor dejeme saber a traves de idolidiadarias@gmail.com
ResponderEliminarpor favor n publique este comentario utilizo esta via porque no tengo otra
Este es el correo electronico de este Blog y del editor.
ResponderEliminarcubareligion@yahoo.com