Una entrevista del periodista Ricardo Fernández al líder del Movimiento apostólico sobre las perspectivas actuales en Cuba y en la Iglesia.

Para desarmar argumentos mentales en Cuba.

En medio de una coyuntura política que ha traído expectativas a los cubanos, nuestro Semanario Digital se dirigió al Apóstol Bernardo de Quesada Salomón, para conocer su criterio sobre las perspectivas actuales.

¿Qué puede servir de catalizador en nuestro país?

Es necesario cambiar el ambiente que se vive. Una forma muy efectiva y poco usada es la información. Hay fortalezas mentales e ideológicas que se derrumban con información. Hay personas que son como son, no porque tenga un demonio, sino por las fortalezas mentales sembradas. La forma de derribar esos conceptos  es con la información que hace libre.

¿Por qué, entonces, hay gente que dice que con hablar nada vas a resolver?

Se me ocurre otra pregunta para responder la anterior. ¿Tendrán ellos razón? ¡No tienen ninguna razón! ¡La verdad rompe los tabúes y los mecanismos esclavizantes! Quien trata de decir que no hables entonces lo que teme es que lo que hablas rompa muchas fortalezas.

¿Por qué hay tantas personas en nuestro medio que les resulta tan difícil expresarse con libertad y sin temor?

Ricardo Fernandez ,Periodista

Porque el desconocimiento en cualquier campo del saber te hace inseguro. Cuando tú dominas determinado mecanismo, eres más libre para enfrentar las situaciones que en ese mecanismo se puedan presentar. En otras palabras: cuando tú no sabes leyes y los derechos de los seres humanos que nos han sido otorgados por Dios, que fueron luego establecidos por las leyes humanas, te mueves en la vida lleno de temores.

¡Opinar no es un delito, opinar es un derecho! Lo que se sancionan son delitos cometidos, no puntos de vistas u opiniones.

¿Hasta dónde tengo que respetar las leyes humanas?

Hasta que dichas leyes no choquen descaradamente con la ley máxima, la ley de Dios, que está por encima de todas ellas. Por ejemplo, nadie me puede obligar a agarrar un arma, ser un agente encubierto, tener otra mujer, tomar bebidas o drogas en contra de mis principios, pertenecer a una asociación en contra de mi voluntad.

¿Hasta qué punto los gobernantes han sido puestos por Dios?

¡Hasta ningún punto! Dios no ha puesto ni pone a ningún gobernante. Dios lo que ha puesto es el concepto de gobierno, autoridad y sujeción justa. Los pueblos tienen el fruto de sus propias decisiones, sean estas buenas o malas.

La bendición o la maldición nunca es inocente, siempre tiene causas. Dice Proverbios “que cuando los justos dominan, el pueblo se alegra, más cuando domina el impío, el pueblo gime”, ¡se da cuenta que siempre el factor común es el elemento humano!

¿Entonces cómo algunos dicen otra cosa, escudándose en Romanos 13?

Ap.Bernardo de Quesada

Los que quieren usar el texto fuera de lugar te citan: “Sométase toda persona a las autoridades superiores; porque no hay autoridad sino de parte de Dios, y las que hay, por Dios han sido establecidas. De modo que quien se opone a la autoridad, a lo establecido por Dios resiste; y los que resisten, acarrean condenación para sí mismos".

Pero después de eso la Biblia explica: “Porque los magistrados no están para infundir temor al que hace el bien, sino al malo. ¿Quieres, pues, no temer la autoridad? Haz lo bueno, y tendrás alabanza de ella”

Estos textos nada dicen sobre que las autoridades están para machucar, perseguir, o acosar a los que hacen lo bueno. Una de las desgracias más indignas que le puede ocurrir a la Iglesia de Cristo, es dejarse pisotear sus derechos bíblicos y callar; cuando lo que hay es que levantar la voz (Hechos 5:29).

Los que han predicado sujeción, no lo han hecho por revelación, sino por cobardía. “O tomas la autoridad dada por Dios, o alguien la tomará y usará en contra tuya”, dice Jhon Bevery.

¿Cuál es el delito más grave en una sociedad cerrada?

Cada vez que alguien piensa y se manifiesta por encima del status quo, esa persona es una potencial amenaza para ese aparato que trata de conservar el poder. No porque esté cometiendo un delito, sino porque hace libre cuando comunica, socaba, y pulveriza el viejo aparato.

¿Qué opina de la doble moral del cubano?

Es una de las cosas más denigrante de la individualidad de todo ser humano. Es catastrófico cuando no eres capaz de expresar en público lo que eres y sientes y luego en privado tratas de desahogarte.

El asunto es que los mismos que están tratando de hacerte decir lo que quieres que diga, ellos mismos también son esclavos del entorno.

¿Qué cree usted caracteriza a la iglesia cubana?

¡Su fe y su ingenuidad! Su fe, porque las circunstancias nos han obligado a depender enteramente de Dios; ingenuidad, porque el promedio general de los cristianos se han sublimado a la mentalidad de las cuatro paredes, siendo analfabetos tanto en la propia mentalidad abierta de revelación de la Palabra, como en asuntos seculares del entorno socio-político.

¿A su juicio qué elementos presentes en los países del mundo actual, harían que la sociedad cubana saliera e su inmovilismo?

Bueno, ¡aclaro que ningún sistema humano es completamente justo ni totalmente incluyente! Pero sí hay sociedades menos justas que otras y las hay en extremos injustos e insoportables.

Son decenas y hasta centenas las peticiones que te mencionaría, aunque me limito a cinco para una Cuba “medianamente justa”:

Una plena libertad religiosa para ejercer la fe en el Dios verdadero. Esto implica que podamos construir, sin estorbo, la infraestructura para su realización. Es decir, que podamos construir amplios templos, alquilar instalaciones para eventos cristianos, tener acceso a los medios de difusión masiva, o impresión de literatura.

Otro punto importante es la existencia de elecciones libres con multipartidismo con un proceso electoral transparente cada determinados años.

En lo económico, la libertad y el reconocimiento de la empresa particular, haría un cambio radical. Una persona que se sabe con derechos y garantías, va a explotar al máximo su capacitad de inventiva. El igualitarismo fue una farsa, tan dañina como el capitalismo salvaje controlado por el Estado que hoy vivimos.

Otro tema del ámbito económico es la venta de autos, y demás equipos nuevos, a precios del mercado mundial. Los precios en nuestro país están inflados al extremo quedando fuera del alcance de la gran mayoría de los cubanos.

Y por último, necesitamos una nueva carta magna (constitución) que garantice y respalde todos los derechos que  nos da la ley. Una nueva constitución garantizaría nuestros derechos sin necesidad de adular al partido de turno. Vemos que el gobierno cubano está apoyando una nueva constitución en Venezuela cuando la anterior sólo data de 1999, y la de acá es de 1976, cien veces más inadecuada, y obsoleta que la del estado del Sur.

Señalo, que todo esto es como normalmente se vive en las sociedades libres y en democracia. Si algunos de los lectores se siente incómodo por los aspectos tratados es una señal de que no es libre. Y desde hoy debe demandar lo que le corresponde legalmente siguiendo el principio que todo lo que hizo Dios “lo hizo bueno en gran manera”. Dios le dio al ser humano la capacidad de gobernar la creación y disfrutarla ¡lo único que Dios no mandó es a controlar a otro ser humano!

*Ricardo Fernández Izaguirre. Es el Editor de Fuego y Dinámica, Semanario Digital Cristiano Email: ricardoynidiana@nauta.cu. Web: http://maifd.cubava.cu/, @FuegoyDinamica , @RicardoMAIFD