Carta abierta a todos los que aman a nuestro Señor Jesucristo con amor inalterable.
Primera Parte
Por: Pbro. Homero Carbonell.*
La gracia sea con todos los que aman a nuestro Señor Jesucristo con amor inalterable. Efesios 6:24
Me llamo Homero Quintín Carbonell González, Pastor asociado a la Convención Bautista de Cuba Occidental desde el mes de Septiembre de 1962, fecha en que inicio mis estudios para tal fin. El 14 de Enero del 2011 arribé a los 52 años de haber aceptado a Jesucristo como mi salvador personal, de los cuales he ministrado como Pastor durante 48 años y 60 días; primeramente entre los años 1962 al 1974, en las congregaciones bautistas de Santiago de Las Vegas, Quiebra Hacha, Cabañas, Las Delicias del Cotorro, Loma de Tierra, Santa María del Rosario, Catalina de Güines, Párraga y Calabazar localizadas, unas en la entonces provincia de Pinar del Río, y otras en Ciudad Habana y Provincia Habana . Al término de este período ministré en unión de mi esposa e hijos en la iglesia de San Antonio de las Vueltas por casi un decenio y desde allí también serví en diferentes etapas como pastor interino en las iglesias de Taguayabón, Placetas y Camajuaní, todas en la provincia de Villa Clara; hasta que posteriormente acepté el ofrecimiento del pastorado de la Primera Iglesia Bautista “La Trinidad” de Santa Clara, también en Villa Clara. En dicho lugar, trabajé desde 1984 hasta el 2010, para un total de 26 años y 60 días como pastor de esta Iglesia.
Desde el inicio de mi trayectoria como Pastor, mi ministerio se forja dentro del marco de los días de la euforia, del triunfo del proceso revolucionario cubano, que después devino en el actual sistema comunista (experiencia que a mí no me sorprendió, lo cual explico más adelante). Este acontecimiento me marcaría, en cuanto a decisiones y estrategias a implementar, para predicar con éxito el Evangelio del Señor Jesucristo en el nuevo orden social, para el cual independientemente de la preparación bíblico- teológica que el Seminario de la Asociación impartía en ese momento, éste no tenía un currículo diseñado para equiparnos con las herramientas necesarias, a fin de enfrentar el reto ideológico que se nos venía encima. Esta fue una experiencia común de todas las instituciones religiosas y no religiosas del país. Fue una experiencia que sorprendió a todos, desde los líderes más intelectuales y sobresalientes de nuestra obra, hasta los menos preparados.
Como bien se entenderá, el 14 de Enero tiene para mí un doble significado, pues fue también ese día, pero del año 1940 cuando mis ojos contemplaron por vez primera el mundo en que vivimos, y que después de haber militado en el catolicismo desde los 7 años de edad, ahora, debido al contacto directo con la Biblia, mi vida tomaba una proyección diferente, como resultado de haber entendido y asimilado la doctrina del Nuevo Nacimiento enseñada por el Señor Jesucristo y disfrutar de la genuina visión cristiana del mundo, su desarrollo y fin.
En ese entonces, no obstante tener 19 años de edad, ser un estudiante del bachillerato antiguo, (hoy Preuniversitario) estar al margen de los quehaceres políticos y no saber detalles de la doctrina Marxista Leninista, tenía nociones del inmediato rumbo social del país por formar parte de una familia que estaba comprometida con el proceso de rebelión contra la antigua administración gubernamental.
VIDEO de la Iglesia Bautista "La Trinidad" de Santa Clara, escenario de los hechos que señala el autor del artículo.
Es durante esos primeros meses, que mi familia me plantea que me integrase al nuevo proceso imperante, para cooperar secretamente con los comunistas; lo cual no acepté, porque nunca he sentido motivación por las actividades políticas. También ya para ese momento, percibo que el Señor me está llamando a comprometerme con la obra misionera y decido prepararme para asumir el rol del pastorado. Como resultado de mi negativa, surge el lógico conflicto familiar a causa de mi criterio, pues ellos no podían entender mi experiencia personal y tratan de intimidarme diciéndome que en el futuro a los cristianos se les iba a perseguir y otras cosas más; determino entonces, independizarme administrativamente de la familia, aunque mis vínculos afectivos se mantuvieron inalterables. Estoy refiriéndome a los seis primeros meses de 1959.
A raíz de estos sucesos, comparto mis inquietudes con el que fue mi primer Pastor y quien me había bautizado, pero tampoco él pudo entender mi crisis espiritual ni la advertencia indirecta que sin proponérmelo el Señor le estaba haciendo a través de mi conversación. El mismo simpatizaba con el proceso de renovación social, aunque no con el comunismo, tal fue así que llegado el momento emigró hacia los Estados Unidos.
Como resultado del compromiso social de mi familia con el nuevo sistema imperante, emigran hacia Oriente para ocuparse de tareas encomendadas a ellos, entonces decidí quedarme solo en La Habana. Era un simple estudiante, no tenía trabajo, no tenía casa donde vivir, no sabía lo que iba a pasar. Me mudé para Cojímar y la Iglesia de Guanabacoa me acogió en su seno, y me autorizó a vivir en su edificio educacional hasta que llegara el momento de mi ingreso al Seminario. Mientras tanto, trabajé en una fábrica de plástico y posteriormente, en la construcción, pero también continuo estudiando el Bachillerato y ocupando responsabilidades en la iglesia local.
Es bajo la influencia de estas experiencias y circunstancias sociales que recibí y obedecí el llamamiento del Señor para ejercer el pastorado hasta los días de hoy. Lo demás es otra parte de la historia.
En obediencia al llamamiento de Dios, ingresé en el Seminario Teológico Bautista en Septiembre de 1962, en un curso que se reduce de los históricos 4 años de estudios a 3 años, pues la inmigración de los pastores en función de esa época es casi masiva.
El 2 de Junio de 1965, me gradué junto a un equipo conformado por siete compañeros en el ministerio pastoral, incluido yo, 2 misioneras y 5 pastores. La graduación se efectúa fuera del horario histórico normal en que se han graduado las antiguas generaciones de pastores, se realizó a las 3pm., a escondidas en la capilla del propio Seminario; no usamos toga, ni birrete, no quedaron fotografías para la historia; aun las firmas plasmadas en los títulos no permanece, la tinta era de mala calidad, lo que para aquel entonces y, según mi interpretación, representa la crisis económica por la que ya pasaba el país. Tiempo después, me veo en la necesidad de fotocopiar el título, para preservar algún recuerdo de mi graduación.
La razón de esta graduación “atípica” se debió a que el nueve de abril de ese mismo año 53, pastores y laicos habían sido arrestados en una sola noche y acusados de agentes de la CIA (Periódico “Revolución” La Habana, Abril 9, Viernes, 1965, Año IX No. 2849). Los graduandos teníamos una mezcla de entusiasmo por haber llegado al final de nuestros estudios y, al mismo tiempo de incertidumbre, pues no sabíamos lo que iba a pasar. Los periódicos de la época hablaban de posible fusilamiento para algunos o para todos, realmente no sabíamos qué estaba sucediendo, estábamos desorientados, prácticamente todo el liderazgo de la Convención estaba sujeto a juicio, desconocíamos si también nosotros seríamos arrestados, ya que muchos de ellos eran nuestros profesores. De súbito, nos dimos cuenta que formábamos parte de una generación de transición que marcaría una época diferente en la vida de las iglesias bautistas de Cuba occidental.
Los Pastores y Laicos que quedamos libres, tuvimos que asumir los púlpitos vacíos y continuar la obra. No pudimos escoger iglesias con comodidades, ni con retribuciones financieras, fuimos a donde se nos necesitó. Es por eso que constantemente digo que el liderazgo de la obra bautista debe recobrar el concepto bíblico del llamamiento en el que mi generación se formó, aunque como es lógico de seres humanos, no todos permanecieron fieles. No había extranjeros a la usanza de hoy, no recibíamos regalos ni donaciones, no había dólares; fueron precisamente los dólares y decisiones inapropiadas en una época de cambios que algunos líderes no supieron interpretar, lo que al final los llevaron a la cárcel.
Al inicio de esta carta, hice referencia a los distintos pastorados en los cuales he ministrado, pero paralelamente a estos, también he cooperado con la Convención Bautista de Cuba Occidental en diferentes cargos tales como: Comité de Relaciones Públicas, Miembro de la Junta Directiva, Secretario Adjunto, Secretario General, Vicepresidente de la Convención, Secretario de la Junta Directiva, Promotor de Mayordomía, Presidente del Comité de Asuntos Legales, Presidente del Comité de Principios Bautistas, Delegado Provincial ante el Registro de Asociaciones de Villa Clara. En lo que se refiere al ámbito internacional y en mi pasada gestión como Secretario General, como miembro del Concilio de la Alianza Bautista Mundial, en la Caribbean Baptist Fellowship, la Federación Bautista Europea, donde he representado a la Asociación, así como ante otras organizaciones Misioneras Mundiales por las que nunca he recibido remuneración alguna.
Como resultado de mi gestión ministerial en esta Iglesia, entre los años (1984 – 2010) se logró una amplia gama de relaciones internacionales que dieron la posibilidad de realizar una serie de proyectos tales como:
a) La reconstrucción del templo y edificio educacional (aunque no se ha concluido aún por razones de la crisis económica internacional y la pérdida del 20% de cada USD dólar que llega a nuestras manos).
b) El anhelo de establecer una finca ecológica cuya solicitud fue denegada por los mandos competentes y cuyo propósito era para beneficiar a toda la comunidad.
c) El ofrecimiento de iglesias hermanas de crear un puente aéreo directamente desde Estados Unidos hasta Santa Clara para avituallar a los hospitales Infantil y Materno y a otras dependencias de la iglesia, así como alimentos para la población, lo cual fue rechazado por el MINVEC de Santa Clara.
d) El establecimiento de una Clínica Bautista con un presupuesto de $100,000 USD anuales que proporcionaría un área más de servicio gratuito para la población y que facilitaría la entrada al país de toneladas de medicamentos sin costo alguno, lo cual no prosperó (todo lo cual está documentado).
Ante estos proyectos fallidos por decisión gubernamental, resulta insultante que en ocasión de la muerte del Rev. Lucius Walker la televisión cubana, en reconocimiento a su persona y su obra humanitaria, divulgue explícitamente…que para hacer labor humanitaria no se necesita permiso…; sin embargo, iniciativas de iglesias locales para hacer lo mismo como cubanos, se han bloqueado, generándonos así una sensación de impotencia.
En el momento que transfiero el pastorado al nuevo Pastor, la Iglesia cuenta con un total de 850 miembros, un total de 90 casas de oración y los siguientes ministerios:
• Infantil que trabaja con 2207 niños de 0 - 11 años de edad.
• Juveniles y jóvenes que trabaja con más de 500 personas.
• Adultos que trabaja con una comunidad bautista de 20000 congregados y simpatizantes en contacto con nuestra congregación.
• Sordos que trabaja con 17, de los cuales, 4 son miembros de la iglesia.
• De niños con necesidades especiales, que trabaja con 85 niños y alcanza a 89 familias.
• Ancianos en el que son atendidos 320 personas.
• 2 grupos musicales que ministran en los servicios de la iglesia y fuera de esta: Alabanza DC y el Shaday
• El Seminario Teológico Bautista “Dr. Luis Manuel González Peña”, con una matrícula actual de 200 estudiantes procedentes de diferentes congregaciones cristianas de Villa Clara y otras provincias, y hacia donde estoy moviendo mi nueva gestión pastoral y en el que continuaré trabajando como Rector, en la preparación integral de pastores, misioneros y laicos que sientan el llamado del Señor a servir en cualquier área que las iglesias necesiten.
En estos momentos, la tesorería de la iglesia cuenta con $ 34,437.84 en moneda nacional (MN) y $ 19,098.51 en divisa libremente convertible USD protegidos en cuentas bancarias, así como una proyección presupuestaria de $455,000 MN para el año 2011.
El liderazgo de la Iglesia, es testigo de que las donaciones entregadas para desarrollar la obra en áreas tales como: la construcción, programas, Seminario, Ministerios, equipos de trabajo, transporte, etc. que han sumado más de medio millón de dólares en el período de mi pastorado, no han sido usados para otros fines que no sea para el programa de la iglesia. Así mismo, algunos líderes también conocen que aun cuando algunos donantes me habían autorizado para hacer uso de parte de dichas donaciones para el sostenimiento personal y familiar, no he usado un solo dólar a pesar de que percibía $500.00 MN mensuales como sueldo equivalente a $ 20.83 CUC, lo que es insuficiente para mantener una familia y no tener ninguna otra fuente financiera fija de entrada mensual. El apartamento que poseemos ha sido un regalo de la familia Jiménez - García diáconos de la iglesia. La subsistencia de mi familia ha venido básicamente de nuestros familiares en el extranjero, que nos han auxiliado económicamente, no porque seamos misioneros en Cuba, sino por razones filiales y esto también lo conoce la casi totalidad de la Iglesia.
Al final de mi gestión pastoral, lo hago dando gracias al Señor por todas las bendiciones que proveyó en el transcurso de la misma, para que las experiencias que vivimos hoy - hayan sido espirituales o materiales, se hicieran realidad. Doy gracias también al Señor por el liderazgo de esta iglesia que desde el principio de mi pastorado me apoyó en toda iniciativa.
Continuará en el siguiente post….,
*Pastor Bautista asociado a la Convención Bautista de Cuba Occidental. Ha desempeñado su Ministerio desde hace más de 48 años como Pastor en varias Iglesias de la región occidental de la Isla. También ha ocupado responsabilidades y cargos dentro de la Convención Bautista, como el de Vicepresidente y Secretario General, entre otros. Miembro del Concilio de la Alianza Mundial Bautista y de la Federación Bautista Europea. Actualmente en la condición de “retiro”. Rector del Seminario Teológico Bautista “Dr. Luis Manuel González Peña”.
Nota del Editor: Hemos recibido un extenso documento con el título: “Carta abierta a todos los que aman a nuestro Señor Jesucristo con amor inalterable”, considerado como un documento, “abierto” y “público”, de la autoría del Pbro. Homero Carbonell, conocido Pastor y líder convencional de la iglesia Bautista en Cuba. Los argumentos esgrimidos por el autor del documento se explican por si solo y será publicado en tres parte de forma íntegra en este Blog, compartido con otros medios en la Red y enviado a las organizaciones y personas que menciona el autor en su testimonio. De esta forma damos continuidad al trabajo que realiza este Blog de dar a conocer de forma completa cada documento que nos hacen llegar desde Cuba y que contiene opiniones y testimonios que forman parte de la historia reciente de la Iglesia en Cuba. El Editor.
El mejor pastor,la major persona y el lider spiritual mas honesto y sabio que hemos conocido jamas,respeto,amor y la seguridad que Dios esta con el.
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